El Club Deportivo Alhaurino consiguió un importante empate 58 años después (ante el Hispania de Almería) de la última vez que pisaba el Estadio de la Juventud Emilio Campra (por entonces denominado Estadio de la Falange) ante el Poli Almería a dos tantos, un viejo conocido que pese a que se adelantó en el marcador subestimó al conjunto azulillo que empató a fuerza de coraje y entrega en la recta final del choque.
El encuentro tenía todo los ingredientes de ser uno de los más emocionantes de la temporada y no defraudó a los asistentes al choque donde unos 300 aficionados, 100 desplazados desde Alhaurín el Grande en dos autobuses no pararon de animar a sus respectivos equipos durante todo el envite.
Los dos equipos se tuvieron respeto durante los primeros compases del encuentro aunque el Decano poco a poco le empezó a plantar cara a los locales y comenzó a llegar con cierto peligro hacia la portería defendida por Manu.
El primero en avisar fue Zalea pero su disparo se fue fuera por muy poco y luego Cristian puso de nuevo en apuros al meta local aunque el Poli Almería gozó de una buena ocasión para ponerse por delante en el marcador tras anular el trencilla un tanto a Adri Miranda por claro fuera juego.
Pero el Decano aún gozó de dos ocasiones para ponerse por delante en el marcador, la primera y la más clara tras un robo de balón en el centro del campo donde Cristian se fue del defensa pero su tiro cruzado se marchó junto al palo izquierdo de la portería tricolor, y tras un saque de esquina Triki pudo marcar pero su lanzamiento se fue muy escorado junto a póster izquierdo de la portería almeriense.
Ya en la segunda mitad la suerte se decantó a favor de los locales cuando a los tres minutos de la reanudación una volea desde fuera del área de Carlos Montellanos se envenena y acaba superando por alto al meta Sandro que no pudo hacer nada para detenerlo.
Pero la mala suerte se volvió a cebar a reglón seguido de nuevo con los azulillos, una jugada a la contra por banda derecha acaba en las botas de Adri Miranda que de nuevo en dudosa posición consigue poner el 2 - 0 en el marcador ante las protestas de los jugadores azulillos y el júbilo de la parroquia local.
Muy felices se las veían los aficionados almerienses que subestimaron al rival y comenzaron a lanzar cánticos en la grada como si de un ascenso a Tercera División se tratase pero esas muestras de júbilo hizo reaccionar al Decano que adelantó sus líneas y dió entrada a David Sánchez, Portillo y Paco para hacer un juego más directo en busca del empate.
Entonces fue cuando la balanza de declinó completamente para el cuadro azulillo y tras varios avisos de Zalea, Cristian, Víctor Rueda o Diego llegaría la jugada clave del encuentro cuando una inclusión por la banda derecha de Portillo hace un pase medido a Zalea que toca lo justo de espuelas para habilitar totalmente sólo a Paco que entrando desde atrás encara al meta almeriense para poner junto al palo derecho el 2 - 1 en el marcador.
El tanto sentó como un auténtico jarro de agua fría no sólo a los aficionados locales, sino a plantel tricolor que veía como el conjunto Alhaurino desbordaba con mucho oficio una y otra vez las las líneas en busca del empate e incluso llevando la batuta del encuentro,
Y tanto fue el cántaro a la fuente que acabó rompiéndose a favor del Decano, cuando se entraba en el último cuarto de hora del choque un lanzamiento de esquina magistralmente lanzado por Víctor Rueda es cabeceado de manera impecable por Zalea entre cuatro defensores al fondo de la portería provocando el júbilo del centenar de aficionados azulillos desplazado a tierras almerienses ante el silencio e indignación entre los aficionados locales que veía como el Decano a fuerza de coraje conseguía empatar el encuentro cuando festejaban la victoria antes de tiempo.
Pero el choque aún no había finalizado y quedaban por delante los últimos diez minutos del encuentro donde el capitán Triki recibía una rigurosa segunda tarjeta amarilla que lo conduciría al túnel de vestuarios dejando a los de Alhaurín el Grande con 10 hombres sobre el terreno de juego y mucho partido aún por delante.
El Decano en vez de amilanarse y pese a jugar con un jugador menos plantó cara al rival neutralizando en todo momento, disfrutando de varias ocasiones de gol por parte de Paco e incluso dando entrada al terreno de juego a los jugadores del filial Raúl Sánchez y Gallego para apuntalar la inferioridad numérica.
Finalmente el planteamiento táctico de Sánchez Frías que tuvo que dirigir desde la grada tras varios cambios de ubicación y las indicaciones desde el banquillo de Beni Romero culminaron en un importante punto que da la oportunidad al Decano de ser el único equipo en poder optar a la segunda plaza de ascenso directo que ostenta el Alhaurín de la Torre CF en las dos últimas jornadas que restan al campeonato liguero.
Tras el choque, los jugadores agradecieron al centenar de aficionados azulillos su desplazamiento desde Alhaurín el Grande para apoyarlos en el choque acercándose a la grada para festejar un importante punto que lo mantiene en el tercer puesto tras conseguir empatar en casa del cuarto clasificado.
El encuentro tenía todo los ingredientes de ser uno de los más emocionantes de la temporada y no defraudó a los asistentes al choque donde unos 300 aficionados, 100 desplazados desde Alhaurín el Grande en dos autobuses no pararon de animar a sus respectivos equipos durante todo el envite.
Los dos equipos se tuvieron respeto durante los primeros compases del encuentro aunque el Decano poco a poco le empezó a plantar cara a los locales y comenzó a llegar con cierto peligro hacia la portería defendida por Manu.
El primero en avisar fue Zalea pero su disparo se fue fuera por muy poco y luego Cristian puso de nuevo en apuros al meta local aunque el Poli Almería gozó de una buena ocasión para ponerse por delante en el marcador tras anular el trencilla un tanto a Adri Miranda por claro fuera juego.
Pero el Decano aún gozó de dos ocasiones para ponerse por delante en el marcador, la primera y la más clara tras un robo de balón en el centro del campo donde Cristian se fue del defensa pero su tiro cruzado se marchó junto al palo izquierdo de la portería tricolor, y tras un saque de esquina Triki pudo marcar pero su lanzamiento se fue muy escorado junto a póster izquierdo de la portería almeriense.
Ya en la segunda mitad la suerte se decantó a favor de los locales cuando a los tres minutos de la reanudación una volea desde fuera del área de Carlos Montellanos se envenena y acaba superando por alto al meta Sandro que no pudo hacer nada para detenerlo.
Pero la mala suerte se volvió a cebar a reglón seguido de nuevo con los azulillos, una jugada a la contra por banda derecha acaba en las botas de Adri Miranda que de nuevo en dudosa posición consigue poner el 2 - 0 en el marcador ante las protestas de los jugadores azulillos y el júbilo de la parroquia local.
Muy felices se las veían los aficionados almerienses que subestimaron al rival y comenzaron a lanzar cánticos en la grada como si de un ascenso a Tercera División se tratase pero esas muestras de júbilo hizo reaccionar al Decano que adelantó sus líneas y dió entrada a David Sánchez, Portillo y Paco para hacer un juego más directo en busca del empate.
Entonces fue cuando la balanza de declinó completamente para el cuadro azulillo y tras varios avisos de Zalea, Cristian, Víctor Rueda o Diego llegaría la jugada clave del encuentro cuando una inclusión por la banda derecha de Portillo hace un pase medido a Zalea que toca lo justo de espuelas para habilitar totalmente sólo a Paco que entrando desde atrás encara al meta almeriense para poner junto al palo derecho el 2 - 1 en el marcador.
El tanto sentó como un auténtico jarro de agua fría no sólo a los aficionados locales, sino a plantel tricolor que veía como el conjunto Alhaurino desbordaba con mucho oficio una y otra vez las las líneas en busca del empate e incluso llevando la batuta del encuentro,
Y tanto fue el cántaro a la fuente que acabó rompiéndose a favor del Decano, cuando se entraba en el último cuarto de hora del choque un lanzamiento de esquina magistralmente lanzado por Víctor Rueda es cabeceado de manera impecable por Zalea entre cuatro defensores al fondo de la portería provocando el júbilo del centenar de aficionados azulillos desplazado a tierras almerienses ante el silencio e indignación entre los aficionados locales que veía como el Decano a fuerza de coraje conseguía empatar el encuentro cuando festejaban la victoria antes de tiempo.
Pero el choque aún no había finalizado y quedaban por delante los últimos diez minutos del encuentro donde el capitán Triki recibía una rigurosa segunda tarjeta amarilla que lo conduciría al túnel de vestuarios dejando a los de Alhaurín el Grande con 10 hombres sobre el terreno de juego y mucho partido aún por delante.
El Decano en vez de amilanarse y pese a jugar con un jugador menos plantó cara al rival neutralizando en todo momento, disfrutando de varias ocasiones de gol por parte de Paco e incluso dando entrada al terreno de juego a los jugadores del filial Raúl Sánchez y Gallego para apuntalar la inferioridad numérica.
Finalmente el planteamiento táctico de Sánchez Frías que tuvo que dirigir desde la grada tras varios cambios de ubicación y las indicaciones desde el banquillo de Beni Romero culminaron en un importante punto que da la oportunidad al Decano de ser el único equipo en poder optar a la segunda plaza de ascenso directo que ostenta el Alhaurín de la Torre CF en las dos últimas jornadas que restan al campeonato liguero.
Tras el choque, los jugadores agradecieron al centenar de aficionados azulillos su desplazamiento desde Alhaurín el Grande para apoyarlos en el choque acercándose a la grada para festejar un importante punto que lo mantiene en el tercer puesto tras conseguir empatar en casa del cuarto clasificado.